martes, 4 de marzo de 2008

La educación moral cívica y social como base parala resolución de los conflictos humanos.

Estamos viviendo en los momentos más críticos de la historia de la humanidad. Siempre hubo homicidios, violencia, enfermedades, desastres naturales, pobreza, guerras, inmigración, etc., pero nunca antes con tanta frecuencia e intensidad como la de nuestros días.

Es momento de reflexión personal porque se han perdido los valores, los principios, la ética y la moral. Y ésta es la razón por la que la violencia de género, la violencia escolar, familiar y social esté alcanzando una dimensión tal.

La NationMaster situa a Colombia como el país donde más asesinatos se produjeron en el 2007 (0.617847 por 1.000 habitantes ), seguido de Sudáfrica (0.496008 por 1.000 habitantes), Jamaica , Venezuela, Rusia y Méjico (0.130213 por 1.000 habitantes). España se encuentra en el puesto número 48 de 62 países en total, con un promedio criminal de 0.0122456 personas asesinadas por cada 1.000 habitantes. Estados Unidos ocupa el puesto número 24 y Qatar (frontera con Arabia Saudí) ocupa el último puesto.

Por no mencionar las estadísticas de abortos donde sólo en Estados Unidos se produce un aborto cada 2o segundos y en nuestro país uno cada 6,6 minutos (datos del 2.006) convirtiéndose en la primera causa de muerte en España. O las estadísticas de actos terroristas o de violencia familiar.

¿De dónde viene el problema? ¿Qué solución hay para la humanidad? Si nos paramos un momento a reflexionar, nos daremos cuenta de que la estructura familiar ha cambiado por completo y con ello la estructura social; por otro lado la tecnología ha hecho posible desarrollar y potenciar los medios de comunicación, los cuales nos "avalanchan" con programas de violencia y discriminación en cualquiera de sus formas; por otro lado las escuelas parece que hubieran perdido el norte. Se necesita no sólo una formación curricular que prepare al individuo para el mundo laboral, si no una formación cívica y social. Una educación capaz de formar a individuos libres e iguales en derechos, reflexivos y críticos, responsables y comprometidos con la sociedad. Es necesario que desde la escuela se enseñe a practicar el diálogo como instrumento valioso para las relaciones humanas, que no es innato en el hombre pero que se puede cultivar. De este modo las relaciones humanas comenzando desde la familia y terminando por la sociedad en general se vería grandemente beneficiada (desde los divorcios hasta los conflictos bélicos)

Sin duda estamos viviendo tiempos que requieren reflexión y toma de conciencia, pero sobre todo actuación a nivel personal y social. ¿A dónde llegaremos? Como decíamos antes ¿dónde está la solución? Desastres naturales, enfermedades nuevas y mortales, terrorismo, violencia, degradación del ser humano.... Como educadora podría deciros que una educación basada en el civismo en la ética y en la moral sería la solución... pero como dice Ballester, L. y Rincón, J.C. (2.005) en el V Congreso Internacional Virtual de Educación, "la posmodernidad se la destrucción del ser humano, pues la muerte de Dios, de los grandes sistemas y de la historia contemporánea, lleva solapada, como el reverso de la moneda, la muerte del ser humano moderno. Este hecho, en el terreno de la educación moral cívica, tiene unas repercusiones gravísimas, pues si muere el ser humano con él también muere la moral, en su doble vertiente (personal y social), y su exigencia: los valores, los ideales, las normas, los principios, los fines, en definitiva, el civismo."

Se ha perdido a Dios y si Él no está presente en nuestra vida todo lo demás es en vano. Se ha perdido la fe, la esperanza y el amor al prójimo, o sea, en términos educativos, el civismo, lo que nos hace ciudadanos responsables, con la consecuente auto- destrucción del ser humano y por lo tanto de nuestro planeta. ¿Llegará ese día? Si realmente te preocupa te invito a que leas este otro artículo.

2 comentarios:

Asier dijo...

Hola Susana:

De paso por aqui, para dejar constancia que hay muchas y diversas formas de ver la profesion ( y por que no decirlo, la vida).

El articulo contiene verdades como puños, y no sere yo quien las refute. Lo que si abogo, es por , intentar positivar este mundo, mejorarlo cada uno desde si mismo, y luego hacia los demas, y por ende, no caer en el alarmismo.

El ser humano es como es..con sus virtudes (que tambien sería bueno discernirlas ) y sus defectos (de los que se dan buena cuenta en el articulo).

Animo y buena suerte con el blog.

Lucy Gómez de Valdiviezo dijo...

Susana, me ha parecido interesante el análisis que haces sobre lo que está generando la pérdida de valores. Me gustó mucho la reflexión final del artículo.


Suerte